sábado, 27 de junio de 2009

El rey ha muerto

No fui muy cercana de la música de Michael Jackson, por que en la década donde estaba más presente yo era muy peque, pero si recuerdo que su música me agradó, no al grado de comprar un disco pero si me hacía mover mis piecitos al momento de escucharlo.

Recuerdo que mi tía Ros tenía el disco de Thriller, si en acetato pero la verdad no recuerdo haberlo escuchado.


Ahora, todo es su música, su muerte, las cosas que hizo mal, las especulaciones sobre una sobre dosis de morfina, todo el día sus canciones, locutores llorando al dar la noticia. Yo fui una de las primeras que lo supo en mi trabajo, y de repente todas las niñas frezas hablaba de cuando ellas fueron al concierto dado en México y hablaban como si fuera alguien de su familia el que murió.

La verdad ya estoy harta, tal vez por que no soy su fan y por eso ya me hartaron tantos comentarios, tal vez, el día que muera alguno de los Bunkers o de los BSB si estaré sufriendo y seguramente no habrá tanta cobertura como en esta ocasión o no me enteraré como cuando murio Jonathan Brandis, uno de mis novios actores de Holiwood y yo ni me enteré. Ja.
En este momento comentare mi anecdota con Michael. Cuando vi el video de Thriller me impactó, la forma de bailar, la producción de esa pequeña película hizo que me enamorara de la canción. Tiempo despues fue una de las primeras canciones a las que le puse coreografía para un día de muertos ahi por 1996, claro que mi coreografía estaba muy lejos de la de ellos pero en realidad trate de hacerla lo más apegada posible y sobre todo que contagiara esa mágia del baile en conjunto, aunque en realidad aunque yo di todo de mi parte el grupo con el que participé no fue el mejor, pero en fin.
Pues ya se murió, ya no mas bailecito del hombre en la luna, ya no más calcetines blancos con zapatos y pantalón negro, ya no más peligro para los niños en Neverland, ya no se le caerá la cara a pedazos y ya basta de excentricidades. Lo siento para quienes ya habían comprado boleto para sus conciertos en Londres, mi más sentido pezame.




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